El último dragón

$9.500,00
El último dragón $9.500,00

Gustavo Roldán, Manuel Purdía
El último dragón
Norma

Páginas: 72
Altura: 20.0 cm.
Ancho: 13.0 cm.
Lomo: 2.0 cm.
Peso: 0.145 kgs.
ISBN: 9789875457850
Encuadernación: Rústica
Año de edición: 2019-06-01
Colección: TORRE DE PAPEL ROJA

Nadie mejor que el sapo para contar las aventuras de un dragón en el monte chaqueno. Así nos enteramos de la vez que el elefante se confundió a las iguanas con dragones, o de cuando el dragón asustó a la vizcacha, o de la vez que el último dragón se encontró con la última dragona y se enamoraron. En este libro aparecen los animales del monte chaqueño como el quirquincho, la lechuza, la vizcacha, la cotorra, las iguanas, el yacaré, el yaguareté, el tapir, el piojo, el zorro, el oso hormiguero y no falta don elefante. Como en toda la narrativa de Roldán, en los relatos prevalece la oralidad, el sentido del humor y la poesía que aporta belleza, ternura y hasta cierta melancolía. Se narra en forma preciosa y divertida la vida del monte, el viento, el silencio, la naturaleza . Cada uno de los animales interpreta su propio carácter y el de los humanos, dando lugar a la aventura, la gracia, los chismes, las envidias, los enojos fogosos, algún que otro merecido por allí a quien anda con habladurías, los miedos, alguna vanidad, la alegría de vivir en ese monte tan querido.

Gustavo Roldán, Manuel Purdía
El último dragón
Norma

Páginas: 72
Altura: 20.0 cm.
Ancho: 13.0 cm.
Lomo: 2.0 cm.
Peso: 0.145 kgs.
ISBN: 9789875457850
Encuadernación: Rústica
Año de edición: 2019-06-01
Colección: TORRE DE PAPEL ROJA

Nadie mejor que el sapo para contar las aventuras de un dragón en el monte chaqueno. Así nos enteramos de la vez que el elefante se confundió a las iguanas con dragones, o de cuando el dragón asustó a la vizcacha, o de la vez que el último dragón se encontró con la última dragona y se enamoraron. En este libro aparecen los animales del monte chaqueño como el quirquincho, la lechuza, la vizcacha, la cotorra, las iguanas, el yacaré, el yaguareté, el tapir, el piojo, el zorro, el oso hormiguero y no falta don elefante. Como en toda la narrativa de Roldán, en los relatos prevalece la oralidad, el sentido del humor y la poesía que aporta belleza, ternura y hasta cierta melancolía. Se narra en forma preciosa y divertida la vida del monte, el viento, el silencio, la naturaleza . Cada uno de los animales interpreta su propio carácter y el de los humanos, dando lugar a la aventura, la gracia, los chismes, las envidias, los enojos fogosos, algún que otro merecido por allí a quien anda con habladurías, los miedos, alguna vanidad, la alegría de vivir en ese monte tan querido.